Saltar al contenido
Guapacho.com

Lo más importante en la experiencia del televidente

13 diciembre, 2019

Desde hace ya varias generaciones la televisión hace parte de los hogares como el medio de entretenimiento e información predilecto entre los espectadores y, como es lógico, la imagen que perciben los usuarios a
través de un televisor ha tenido numerosas transformaciones a lo largo de la historia. LG Electronics, como compañía líder en soluciones tecnológicas para el hogar, ha hecho parte esencial de la evolución de la imagen y se ha consolidado como uno de los actores que han revolucionado la industria.

Al hablar de evolución de la imagen, es preciso relacionar tanto los avances por tipos de pantalla, así como la transformación en términos de resolución. Estos dos conceptos están directamente ligados, pues
evolucionan de manera simultánea y la calidad de la imagen que perciba el espectador, dependerá de una correcta alineación entre ambos. La resolución, aunque comúnmente está asociada a la cantidad de pixeles
en una pantalla, en realidad, en términos de televisores, se mide a través de las líneas verticales y horizontales que se pueden crear cuando se apagan las líneas de los pixeles.

Adicionalmente, el contraste de la imagen también es determinante para hablar de resolución, pues está relacionado con la diferencia que se percibe -en cuanto a la cantidad de luz- entre el objeto más oscuro (o
negro) y el más blanco de la imagen en una pantalla.

Primero, se implementó la resolución SD (por sus siglas en inglés) o Definición Estándar, que acompañaba a las pantallas de TV que funcionaban con el modelo CRT, tecnología que se mantuvo hasta la década de los 90s. Luego, hacia finales de los años 90, aparecen las pantallas plasma y con ellas el primer gran cambio en la calidad de la imagen, la resolución HD o Alta Definición, con un número de pixeles 1366 x 768.

Para inicios de los 2000, comenzó la implementación de las pantallas LCD y la resolución se transformó a Full HD. Con la aparición de las pantallas LED y los primeros Smart TV, hacia finales de la primera década del 2000, se empezó a hablar de UHD o Ultra Alta Definición y es la resolución que ha predominado hasta hoy. Junto con las pantallas OLED, cuyo primer modelo de LG Electronics fue lanzado al mercado en 2012 (Fuente), la UHD incluye la resolución 4K, una de las últimas tecnologías y tendencias en cuanto a
contenidos en el país. La Copa del Mundo de 2018 fue la excusa perfecta para que aficionados a este deporte disfrutarán todos estos avances en materia de tecnología y presenciaron desde casa los partidos de este
certamen internacional.

La resolución 4K, a grandes rasgos, indica que una pantalla tiene cuatro veces más pixeles que la resolución Full HD, con 3.840 x 2.160 pixeles; alrededor de 8.3 millones de pixeles en total.

La evolución de la imagen de televisión se ha dado de manera acelerada y continúa, año tras año transformándose para mejorar su calidad y ofrecer a los usuarios ya no solamente un aparato para ver programas o películas, sino una experiencia completa de visualización e interacción con el contenido.

Entonces, si el diseño y las pantallas están a la vanguardia, ¿qué hace falta para seguir mejorando la calidad de la imagen y convertirla en la experiencia que esperan los usuarios? La respuesta está en la Inteligencia
Artificial, uno de los atributos más innovadores y de valor agregado que LG Electronics está implementando cada vez con más fuerza en todo su portafolio, especialmente en los televisores.

La IA llega para mejorar sustancialmente la visualización de contenidos de un usuario que cuente con una pantalla de última generación como la OLED.