Amazon Web Services, Inc. (AWS) anunció hoy la publicación del reporte «Soluciones innovadoras para el cambio climático y la conversación ambiental: tendencias emergentes en la nube», un documento que pone de manifiesto cómo los esfuerzos para abordar los efectos del cambio climático están accediendo a la tecnología de nube para registrar y utilizar volúmenes de datos sin precedentes.
Reafirmando el compromiso de AWS frente al cambio climático, el programa de liderazgo y educación ejecutiva para acelerar la transformación digital de los ejecutivos del sector público, AWS Institute, busca con la publicación del documento resaltar el papel que la nube y la administración colaborativa de datos juegan a la hora de brindar soluciones ambientales sostenibles.
El cambio climático constituye una emergencia capaz de afectar a todos los continentes repercutiendo en vidas humanas y economías enteras. Las personas están experimentando el impacto de cambios en los patrones del clima, lo que se manifiesta en el aumento de los niveles del mar, el deshielo de los glaciares y otros eventos climáticos extremos. A pesar de la pausa temporal en el aumento de emisiones debido a la pandemia por COVID-19, estas están retomando sus niveles más altos debido a la reactivación industrial.
Los proyectos reseñados en el documento comparten estar precedidos por un entendimiento de las amenazas más urgentes para el planeta, las comunidades y las actividades productivas. Así, se plantea que esta comprensión es posible gracias a la disponibilidad de datos de monitoreo que, sin embargo, por su gran volumen presentan dificultades. La Iniciativa de Sostenibilidad de Datos de Amazon (ASDI, por sus siglas en inglés) buscar revertir esta situación, permitiendo acelerar la investigación en materia de sostenibilidad e innovación, minimizando el costo y el tiempo necesarios para que las instituciones adquieran y analicen grandes bases de datos sobre la materia de interés. Su apoyo es transversal a innovadores e investigadores de datos, promoviendo herramientas y conocimientos técnicos que necesitan para desarrollar iniciativas de sostenibilidad y conservación.
La ASDI trabaja con gobiernos y organizaciones científicas en todo el mundo para identificar, alojar y desplegar bases de datos clave en la nube. Se incluyen entre los proyectos adelantados temas como pronósticos y observaciones del clima, datos de proyecciones climáticas, imágenes satelitales, datos hidrológicos, datos sobre la calidad del aire y pronósticos oceánicos.
Ejemplos de aprovechamiento de tecnología de nube para abordar los efectos del cambio climático
El reporte presenta seis ejemplos sobre cómo los clientes de AWS están aprovechando, desde distintos frentes, la tecnología en la nube para abordar los efectos secundarios del cambio climático en océanos, bosques, montañas y ciudades. Los ejemplos presentados son los siguientes:
1. Evaluación del estado del océano, mediante el monitoreo de las poblaciones de tiburones: OCEARCH hace posible que equipos de numerosos colaboradores científicos y pescadores recopilen datos críticos, poniendo los hallazgos a disposición del público a través de acceso abierto. La organización recopila datos de telemetría satelital sobre los movimientos de los tiburones y los pone a disposición del público mediante código abierto en ocearch.org y a través de su aplicación gratuita OCEARCH Tracker App. Los datos recogidos permiten que más de 180 científicos de 90 instituciones en todo el mundo avancen en 23 proyectos de investigación. Además, contribuyen a determinar el estado general del océano, informan sobre una administración pesquera sostenible y aportan a iniciativas enfocadas en la seguridad pública.
2. El monitoreo en tiempo real del deshielo de los glaciares en los Andes peruanos: INAIGEM es un instituto estatal de Perú que investiga cómo reducir el impacto de desastres naturales futuros, tales como avalanchas de lagos glaciares a lo largo de los Andes peruanos. Su meta es reducir el tiempo de respuesta y proveer alertas avanzadas tan pronto como sea posible sobre futuras avalanchas. Para lograr esto, el instituto implementó un sistema de monitoreo en tiempo real de los lagos glaciares más vulnerables. INAIGEM analiza los datos registrados (como la velocidad, el volumen, la masa, la dirección y el impacto sobre el lago glaciar) mediante Machine Learning e inteligencia artificial para calcular la probabilidad de que la avalancha genere grandes inundaciones que puedan perjudicar a las personas que viven al pie de la montaña.
3. Información para tomar mejores decisiones de prevención y planificación de desastres: Digital Earth Africa permite a las naciones africanas realizar un seguimiento de los cambios que se producen a lo largo de todo el continente con un nivel de detalle sin precedentes, al facilitar el acceso a los datos de observación de la Tierra. Esto provee información de gran valor que permite una mejor toma de decisiones en materia de prevención y planificación ante distintas temáticas como inundaciones, sequías, erosión costera y del suelo, agricultura, cobertura forestal, uso del suelo, cambios en la cubierta terrestre, disponibilidad y calidad del agua y cambios en los asentamientos humanos.
La plataforma es una facilitadora de tecnología para observaciones globales, ayudando a usuarios de todo el continente a obtener acceso rápido a petabytes de datos satelitales listos para tomar decisiones. Los usuarios podrán analizar datos fundamentales a minutos de que se encuentren disponibles y utilizarlos para desarrollar sistemas de alerta temprana y preventiva a fin de abordar desafíos de sostenibilidad como la degradación de la tierra, los patrones de cambio climático que afectan la producción agrícola y las tendencias climáticas severas que conducen al desplazamiento comunitario.
4. Garantizar un futuro para los demonios de Tasmania en la nube. El demonio de Tasmania es un marsupial raro, que sólo se encuentra en el estado insular de Tasmania. Se encuentra en peligro no solo por los cambios que provoca el hombre, como los devastadores incendios forestales recientes, la destrucción del hábitat y los accidentes de tránsito, sino también por un cáncer contagioso que causa tumores faciales y ha reducido su población en más del 80%.
Al utilizar el genoma de los demonios de Tasmania, el equipo de Save the Tasmanian Devil Program, busca brindar a los encargados de la conservación en campo información científica detallada y conocimientos sobre la mejor forma de proteger a la especie. Estos científicos están iniciando un proyecto para recopilar y registrar los genomas de esta y otras especies amenazadas en Australia, con el fin de compartir los datos recogidos en el Programa de Base de Datos Públicos de AWS, una iniciativa diseñada para brindar a investigadores de cualquier parte del mudo acceso rápido y bajo demanda a bases de datos de alto valor, con el objetivo de acelerar el descubrimiento científico.
5. Circunnavegar un océano de datos en la Antártida: Saildrone construye y opera una flota de vehículos de superficie no tripulados (USV por sus siglas en inglés) diseñados para recopilar datos oceanográficos y atmosféricos de alta resolución. Estos vehículos se conocen como «Saildrones» y pueden permanecer en el mar hasta 12 meses, transmitiendo datos en tiempo real vía satélite. Los datos recopilados sirven para informar a científicos e investigadores sobre modelos climáticos y predecir fenómenos meteorológicos extremos. De igual forma, han ayudado a tener un mayor conocimiento del dominio marítimo, los mapas y los gráficos y han sido útiles como insumo para la administración sostenible de recursos. Los Saildrones usan la energía eólica y solar renovable para brindar acceso a los océanos del mundo a una fracción del costo de los métodos tradicionales, basados en barcos. Además, reducen de forma drástica la huella de carbono de la observación global de los océanos.
6. El aprovechamiento de una base de datos para fomentar la innovación en temas climáticos y estudiar el impacto de las condiciones climáticas futuras: Gracias a dos subvenciones de la Iniciativa de ASDI a la Earth System Grid Federation (ESGF), la computación en la nube permite a los investigadores climáticos de todo el mundo acceder y analizar el conjunto de datos que se utiliza para el Sexto Informe de Evaluación del Grupo Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCCAR6) de las Naciones Unidas. El informe, que se planea publicar en mayo de 2022, brinda a los hacedores de políticas públicas de todo el mundo la evaluación más reciente de las bases científicas sobre el cambio climático, sus impactos y riesgos futuros, junto con opciones de adaptación y mitigación.
La base de datos de simulación climática, también conocida como el archivo del Proyecto de Intercomparación de Modelos de Clima Acoplados de Fase 6 (CMIP6) agrega los modelos climáticos creados en aproximadamente 30 grupos de trabajo y 1000 investigadores que trabajan en el IPCC-AR6. Una parte del archivo del CMIP6 se encuentra ahora alojada en el primer nodo de información de la ESGF que reside en la nube disponible para investigadores climáticos. El subconjunto inicial de datos representa las ejecuciones del modelo del CMIP6 que científicos climáticos consideran de gran valor. Al alojar el conjunto de datos de simulación climática en la nube, los investigadores pueden llevar a cabo su análisis, lo que elimina la necesidad de descargar y almacenar réplicas de información. Dado al gran tamaño de estas bases, brindar acceso a computar junto a los registros en la nube ayuda a democratizar el acceso y el uso de estos.
En suma, el impacto de tantos proyectos multidisciplinares a lo largo del planeta permite pensar que los esfuerzos públicos y privados por cambiar el curso de la emergencia climática están acudiendo cada vez más a herramientas como las que dispone la ASDI para tomar mejores decisiones a la hora de medir, modelar y monitorear los datos a través del tiempo.
Los efectos de estas iniciativas, apoyadas por ASDI, serán duraderas. Más allá de utilizar la tecnología de nube de vanguardia, es evidente que la huella de la cooperación entre organizaciones y científicos es cada vez de más fácil acceso para el público, lo que seguramente acelerará la investigación en materia de sostenibilidad e innovación. De esta forma, la nube se convierte en un factor clave para la reducción de costos y tiempos en el análisis de grandes cantidades de datos.