A pocos días de despedir el 2009, un nuevo dolor de cabeza aparece para Facebook, la filtración de 267.140.436 millones de registros de usuarios, el pasado 14 de diciembre
Dichos registros corresponden a nombres y teléfonos; datos que pueden ser valiosos y peligrosos en manos de personas inescrupulosas
El investigador de seguridad Bob Diachenko, fue quien se encontró con la base de datos que se encontraba alojada en un servidor de Elasticsearch sin ninguna protección de cifrado o por lo menos una simple contraseña y que estaban compuestos por ID de identificación único de cada usuario y la fecha de su obtención, datos en su mayoría de ciudadanos estadounidenses.
Lo complicado del asunto, es que esta base de datos estuvo disponible hasta el 19 de diciembre en multitud de foros de temática hacker, por lo cual se puede intuir que ha sido descargada y compartida, pese a que ya dejó de estar disponible en el servidor inicial.
La forma en la cual se recopilaron dichos datos de Facebook aún no es clara, pero existen dos hipótesis, la primera es que un grupo de hackers vietnamitas haya aprovechado un fallo en la API de Facebook para obtener la base de datos y la otra idea es que no haya sido nada más sino una recopilación de datos libres y disponibles en la red de manera pública procedente de usuarios que no guardaron bien su información.
Lo cierto del caso, es que es un hecho muy delicado, del cual la red propiedad del señor Zuckerberg deberá poner cuidado y dar la cara.