Las instituciones que prestan servicios de salud han aprendido mucho durante los últimos dos años, en los que el mundo vivió una transformación radical en cuanto a servicios y administración hospitalaria.
La industria de la salud ha experimentado una combinación de factores que cambiaron la manera de ofrecer sus servicios: Desde una digitalización acelerada en procedimientos médicos y administrativos a consecuencia de la pandemia, hasta una mayor conciencia social en el cuidado de la salud personal y una mayor cultura de customer centricity, o poner al paciente en el centro de atención en clínica y hospitales.
Dentro de esta nueva dinámica laboral que se vive en el sector, existen procesos que cumplen una función primordial para poder mantener la atención de calidad como promesa de valor. Uno de ellos es disponer del stock ideal de suministros médicos, para conseguir el equilibrio en una operación eficiente sin costos onerosos para la institución a causa de excedentes.
Las compras en el sector salud son el primer eslabón en la cadena del proceso de atención efectiva al paciente. La profesionalización de la gestión de compras es un paso natural para mantener una operación eficiente y competitiva.
¿Qué ocurre cuando creemos que todo está controlado en el tema de planeación de compras, pero la realidad nos dice lo contrario? Existen algunos mitos sobre planeación que es necesario aclarar para poder mantener compras eficientes:
- Creer que se te tiene todo controlado. Puede ser uno de los problemas comunes hasta que los reportes financieros indican lo contrario. En las instituciones hospitalarias mantener un sobre-stock resulta muy caro por el tipo de productos que manejan, muchos de ellos con temas de caducidad; por otro lado, un stock insuficiente puede derivar en un servicio al cliente deficiente o tener consecuencias más graves en caso de productos que se necesiten con urgencia.
- No es necesaria la digitalización en el área de compras. La digitalización no solo se refiere a mantener datos en la hoja del archivo, en un programa donde se anoten entradas y salidas. Hoy las herramientas tecnológicas permiten tener un completo control sobre las tendencias, con reportes precisos y alertas de compra en los momentos necesarios.
- Siempre habrá emergencias de compras. Si bien esta frase no es completamente falsa, sí existen maneras de reducir al máximo las emergencias, cuando se construyen tendencias que ayudan a planear los suministros que se requieren más en un determinado momento. Apelar a la memoria de los compradores no es suficiente, es necesaria la compilación de información que ayude a desarrollar proyecciones.
- Se pierde mucho tiempo haciendo reportes. Si no se cuenta con las herramientas adecuadas, es una realidad que generar reportes ocupa gran parte del día. Por eso es importante centrar los reportes en las necesidades de información que nos ayuden a tomar mejores decisiones.
- Mantener un buen control de stock puede ser estresante. A mayor planeación, menor estrés. Encontrar esquemas de compras y herramientas de gestión adecuadas, reducen la carga laboral operativa y por tanto el estrés.
“La planeación es una parte fundamental de las instituciones hospitalarias para poder cumplir con las expectativas de los pacientes que hoy en día buscan los mayores estándares de calidad”, comenta, Antonella Ficarra, especialista de la plataforma Plannexo, de la healthtech Bionexo. “La clave está en alinear la planeación a los objetivos de la institución, considerando el customer centricity, aprovechando las herramientas digitales disponibles que faciliten y hagan más eficiente el trabajo”, concluye.