Olivia, consultora especializada en transformación organizacional e innovación, realizó un análisis sobre datos registrados en la red social para profesionales LinkedIn, que detectó que Colombia es el segundo país hispanoparlante de Latinoamérica con más gerentes de innovación registrados en ella: 14.353 profesionales especializados. La cifra es superada sólo por México (18.512) y está por encima de las registradas en Chile (13.409), Perú (8.923) y Argentina (6.353).
Uno de los sectores con mayor influencia en la implementación de innovación en el mercado local es el empresarial, evidente en el resultado del mencionado análisis. Las compañías han comenzado a pensar de manera exponencial, a dejar de lado los modelos tradicionales y a cambiar su cultura organizacional para reinventar el negocio y evolucionar. En el caso particular de Colombia, se observa un impulso hacia la inversión en investigación, desarrollo e innovación en el sector público, tal como lo prueban algunos anuncios recientes como la creación del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación y el Centro Regional para la Cuarta Revolución Industrial en Medellín. Visto así, no es casual que Colombia esté entre los cinco países más innovadores de América Latina según Global Innovation Index 2018, junto con México y Chile que también trabajan de manera similar.
“Las industrias colombianas han puesto dentro de sus agendas estratégicas la adquisición de otras compañías innovadoras o la creación de sus propios departamentos dedicados a la investigación y el desarrollo como la mejor fórmula para no perder terreno. Las decisiones gerenciales y la contratación de talento que aporte en este aspecto son imperativas para las organizaciones y el país está viendo los primeros resultados”, indicó Gabriel Weinstein, Socio y Director de Innovación de Olivia.
“Existe hoy la tendencia a dejar de ver a la innovación como una instancia aislada en el tiempo para, ahora, ser considerada como un trabajo constante y sostenido a largo plazo. Esto explica de alguna manera la creación de oficinas de innovación y la necesidad de tener un conjunto de colaborares que apoyen el proceso”, señala Weinstein. “El trabajo que estas áreas tienen por delante incrementará la demanda de consultoría de valor agregado en el mercado colombiano, bajo el principio de que la ventana de oportunidad para generar un diferencial competitivo tiene un valor estratégico para el crecimiento del negocio, donde el cambio cultural es una pieza clave en los procesos de innovación” concluye.