Stephen Hawking, uno de los fÃsicos teóricos más famosos de las últimas décadas, se atrevió a vaticinar cómo serÃa un eventual Armagedón o fin del mundo.
Para Hawking, el planeta Tierra podrÃa convertirse en una gigantesca bola de fuego, un hecho que ocurrirÃa cerca del año 2600 debido al hacinamiento y al desmesurado consumo de recursos por parte de los humanos.
Según el reputado fÃsico, el cambio climático, los impactos de asteroides y las amenazas del espacio, sumados a las epidemias y al crecimiento desmesurado de la población, hacen que la supervivencia del planeta Tierra sea cada vez más precaria.
En el citado documental, Stephen Hawking detalla que el aumento de la población mundial y el consumo cada vez mayor de recursos energéticos y no renovables nos llevarÃan a un efecto invernadero descontrolado e irreversible. En otras palabras, estarÃamos ante un escenario en el que la atmósfera terrestre se convertirÃa en un gigantesco horno.
El escenario serÃa muy parecido al del planeta Venus, con una temperatura de 250 grados y lluvia de ácido sulfúrico.
Hawking también se atrevió a teorizar, en pleno 2014, sobre el advenimiento de la inteligencia artificial, la cual podrÃa significar el fin de la raza humana, ya que los humanos, expuestos a una evolución biológica lenta, no podrÃamos competir y serÃamos irremediablemente superados.
La solución es tomar medidas para lograr la supervivencia humana a largo plazo. Hawking pidió a la humanidad que tome medidas urgentes para reducir nuestra huella ecológica, desarrollar tecnologÃas sostenibles y considerar la opción de colonizar otros planetas ante el inevitable colapso del planeta Tierra.
Esto no fue proclamado por un divulgador con una conciencia de la realidad alterada o un falso gurú; lo dijo Stephen Hawking, uno de los teóricos y divulgadores cientÃficos más reputados del siglo. Definitivamente, hay que creerle, aunque él mismo explicó que esta situación será una certeza absoluta en los próximos mil o diez mil años.