En los últimos días, Polkadot, el protocolo de red escalable y seguro para Web3, ha logrado un nuevo reconocimiento por tener una de las huellas de carbono más bajas entre los protocolos de blockchain, según un reciente informe de Messari sobre el movimiento de las finanzas regenerativas.
La noticia de que Polkadot haya sido considerado uno de los protocolos Web3 más sostenibles llega junto a otros informes recientes que muestran que Polkadot sigue manteniendo una de las comunidades de desarrolladores más activas en el espacio de la Web3.
“Estamos cada vez más preocupados por innumerables aspectos en los modelos tradicionales de negocio. La sostenibilidad es sin duda uno de ellos, y es por lo que trabajamos continuamente para buscar un futuro más verde y sostenible dentro del mundo cripto. Por otro lado, la privacidad de los datos sigue siendo una preocupación de muchos en la actualidad. Ahora mismo, hay grandes organizaciones que controlan tus datos y te proporcionan servicios que los utilizan.Cuando utilizas un servicio, y más si este es gratuito, significa que tú eres el producto. Esas organizaciones tienen un montón de información sobre tu vida y es por lo que estamos caminando hacia un futuro descentralizado, dónde cada uno tendrá control sobre su vida y sus datos. Nos enorgullece fomentar el diálogo sobre la Web3 y contar con una de las comunidades de desarrolladores más activas en este espacio”, comenta Bertrand Pérez, CEO de la Fundación Web3.
La sostenibilidad en la Web3
Con 21 parachains, más de 250 dapps, 2.500 nodos (incluyendo 297 nodos validadores activos), Polkadot establece el estándar para blockchains verdes gracias al avanzado mecanismo de consenso nominada Proof of Stake (NPoS), con un gasto energético bastantemente inferior en comparación a Proof of Work, que genera un alto gasto energético por la competencia entre mineros para resolver los algoritmos criptográficos para validar las transacciones en la blockchain. Mientras que Proof of Stake implementa validadores elegidos al azar para asegurarse de que la transacción sea confiable y segura.
“El mercado de carbono sigue careciendo de transparencia, lo que dificulta significativamente la participación de empresas y ecosistemas en el proceso de realizar un importante y necesario cambio medioambiental. Es por ello que apostamos por proyectos y tecnologías de confianza que contribuyan a un futuro más verde. Este reconocimiento es la prueba de que estamos trabajando para minimizar el consumo de energía en el ecosistema cripto, compensando las emisiones de carbono de una forma única”, declara Úrsula O’Kuinghttons, Directora de Alianzas y Comunicación de la Fundación Web3.