Tanto las Relaciones Públicas como la Publicidad ayudan a construir marcas y comunicarse con el público objetivo. Y aunque juntas son las mejores herramientas para promover los productos y servicios que ofrece una marca o la visión de una organización, al mencionarlas por separado, cada una de ellas tiene un concepto y misión completamente diferente.
En este sentido, es normal que en algún punto ambos términos se confundan entre sí, pero aquí vamos a despejar todas tus dudas para que conozcas con exactitud la diferencia entre Relaciones Públicas y Publicidad, así que quédate con nosotros y continúa leyendo.
Qué son las Relaciones Públicas y la Publicidad
En cuanto a las Relaciones Públicas, su objetivo principal es construir y mantener buenas relaciones a largo plazo, contribuyendo en el fortalecimiento de la marca u organizaciones afines a través de acciones de comunicación estratégica entre partes interesadas.
Ahora bien, la publicidad es básicamente una forma de comunicación en la que una marca busca promover algún producto o servicio en la mente del consumidor, ¿de qué forma? A través de los enunciados que se realizan en medios actuales con publicidad en línea, al igual que en medios convencionales, como lo es la radio o la televisión.
Al presentarte cada uno de los términos anteriores, te habrás dado cuenta de las notorias diferencias entre Relaciones Públicas y Publicidad. Incluso hemos podido evidenciar que la publicidad suele implicar una inversión económica para su respectiva difusión, a diferencia de las acciones de las Relaciones Públicas que no requieren ningún tipo de transacción financiera, llegando incluso a un público más amplio.
¿Cuál es la diferencia entre Relaciones Públicas y Publicidad?
Las Relaciones Públicasse caracterizan por ser una práctica de comunicación estratégica que tiene como misión principal construir relaciones de beneficio mutuo entre las marcas u organizaciones y su público directo.
Cabe destacar, que las RRPP además de mantener una imagen positiva de la marca o entidad a través de los medios de comunicación o diferentes actividades, como eventos, consiguen la credibilidad y confianza de la misma de manera considerable.
Por mencionar un ejemplo, en la actualidad vemos como los productos de belleza que son recomendados por las Beauty Bloggers suelen tener una receptividad altamente increíble al ser patrocinado por estas influencers y no en un característico anuncio publicitario.
¿La razón? Sencilla, a los consumidores les gusta ver cuando un producto se presenta “genuinamente”, incluso este puede mostrarse en vivo a través de las RRSS, para que los mismos observen cómo se aplica el producto y los resultados obtenidos con el mismo, generando así una mayor afinidad con el consumidor.
Sin duda alguna, las Relaciones Públicas ayudan a crear una conciencia real y buena reputación de la marca en el tiempo. Las metas y los objetivos detrás de una campaña de RRPP exitosa, giran en torno al hecho de que los consumidores tengan más interés y confianza en la marca, por ende la última palabra siempre la tendrá el público meta.
Por otro lado, la publicidad pretende influenciar en una sola cosa, y es en el acto de consumo a corto plazo, implementando técnicas de persuasión de forma auditiva o visual que llamen la atención del público hacia algún producto o servicio.
Por lo consiguiente, la publicidad siempre buscará inducir al usuario a una decisión de compra o consumo inmediato, ¡jamás crear relaciones que perduren en el tiempo! Pero si mayor demanda, siendo este un punto una diferencia indudable ante las Relaciones Públicas.
Además, otra de las diferencias entre las RRPP y publicidad es que esta tiene menor credibilidad, puesto a que detrás del desarrollo de una campaña hay un equipo de mentes ambiciosas que solo buscan vender bienes o servicios, y en otros casos ideologías hasta creencias.
No obstante, si el público objetivo es conocedor de aquello que se le publicita, no cabe la menor duda de que el enunciado no será problema para el mismo, sin embargo, siempre habrá un grupo de personas que seguirá siendo poco empático ante la presencia de publicidad, especialmente aquella que parece ser engañosa o en el peor de los casos excesiva.
En resumen, la mejor manera de promover cualquier marca u organización es tomar en cuenta la Publicidad y Relaciones Públicas para cualquier campaña que busque persuadir al consumidor o fidelizar con la audiencia, permitiéndote así lograr los objetivos previstos mediante diferentes canales de comunicación y estrategias.